miércoles, 30 de marzo de 2011

MEDIDAS DE ACTUACION DURANTE LA ERUPCION VOLCANICA.

MEDIDAS DE ACTUACIÓN DURANTE UNA ERUPCIÓN VOLCÁNICA

RECOMENDACIONES PARA LA POBLACIÓN

(Extraído de las recomendaciones de Protección Civil España; ProtezioneCivileedEmergenze, Regione Liguria)
* Conserve la calma, evitando el pánico.
* Busque refugio bajo techo, si no lo encuentra, procure respirar a través de una tela humedecida de agua o vinagre, eso evita el paso de los gases y el polvo volcánico.
* Además debe proteger los ojos cerrándolos tanto como sea posible. Permanezca bajo techo y cierre puertas y ventanas.
* Tenga precaución de no conducir vehículos por el riesgo a accidentes debido a que aumenta la oscuridad por la caída de ceniza.
* Desconecte la energía eléctrica, corte el agua, el gas, el teléfono y cierre muy bien la vivienda al salir de esta, para evitar accidentes y saqueos.

RECOMENDACIONES.

 RECOMENDACIONES PARA LA POBLACIÓN
(Extraído de las recomendaciones de Protección Civil España; ProtezioneCivileedEmergenze, Regione Liguria )
* Identifique si en su comunidad hay amenaza volcánica y no se ubique dentro de su área de influencia.
* Mantenga almacenados alimentos no perecederos y agua potable para caso de evacuación.
* Cubra los depósitos de agua para evitar contaminación por la caída de ceniza.
* Vigile con el efecto que causa la acumulación de material volcánico sobre los techos, en donde el peso puede aumentar si se mezcla con el agua (colapso).
* Es recomendable tener identificaciones de los miembros de la familia.
* Mantenga una radio con baterías y sintonizado con el fin de recibir las instrucciones. Además de un maletín de primeros auxilios y una linterna con baterías y en buen estado.
* Debido a que las explosiones del volcán pueden causar ondas de aire o de choque que pueden romper vidrios de ventanas, se recomienda colocar cinta adhesiva o tablas que impidan la caída violenta de éstos.
* Aleje los animales de las zonas próximas a los ríos y de lugares donde caigan cenizas por posibles efectos de lahares o avalanchas.
* Evite cultivar en las riberas de los ríos cercanas al volcán o que desciendan de él.

TIPOS DE ERUPCIONES, MEDICIONES Y EVALUACION

TIPOLOGÍA
  Los volcanes se pueden clasificar por su forma y composición:
  • En escudo : se caracteriza por la baja viscosidad del magma, de manera que fluye a través de la chimenea y sale a la superficie formando coladas de lavas.
  • Volcán compuesto : también conocido como estratovolcán . Cuando el magma es viscoso, las burbujas de volátiles lo fragmentan al escapar y los fragmentos producidos se conocen como piroclastos y son lanzados al aire por dichos volátiles. Nos encontraremos así con un volcán formado por coladas y capas de piroclastos alternantes.
  • Cono de escorias : formado únicamente por piroclastos.
  • Domo : formado por capas de magma ácido que no llegan a abandonar el conducto, creciendo sobre él y liberando de forma ocasional los volátiles en coladas piroclásticas.
  • Caldera : formada por el colapso del techo de una cámara magmática semivacía tras una erupción masiva, en general piroclástica.

Los volcanes también se pueden clasificar según el tipo de sus erupciones: el tipo de erupción depende de la composición química del magma y de la cantidad de agua que lleve.
Se clasifican las erupciones por la intensidad y la naturaleza de la actividad explosiva del volcán. El grado de explosividad depende, en gran parte, de la viscosidad de la lava; los más viscosos producen erupciones más violentas que generan grandes nubes ardientes, mientras que otras erupciones con magma de baja viscosidad no son muy violentas.
  • Tipo HawaianoEs relativamente tranquilo, y generalmente se caracterizan por los lagos de lava y flujos lávicos extensos que se generan.
  • Tipo Estromboliano
    Erupciones que son de duración limitada en que los gases atrapados se acumulan debajo de la lava y periódicamente son expulsadas al aire masas de lava y cenizas.
  • Tipo Vulcaniano
    Este tipo de erupción es el más violento, porque la lava más viscosa se solidifica entre las erupciones, y los gases atrapados, alcanzan una alta presión antes de que la lava superior sea expulsada del cráter.
  • Tipo Plineano
    Es muy violento; el magma saturado con gas es expulsado a una gran altura, generando grandes volúmenes de ceniza.
  • Tipo Peleano
    Está caracterizado por la generación de flujos incandescentes de piroclastos que bajan por las laderas del volcán a altas velocidades.
Algunos fenómenos de los volcanes como la actividad sísmica, la deformación del suelo, las emanaciones de gas o actividad fumarólica y la composición química del agua y los vapores que salen de las fumarolas, ayudan a los científicos a saber cuando se empieza a activar un volcán. De todas maneras es imposible predecir el día, hora lugar y tamaño de una erupción
MEDICIÓN Y EVALUACIÓN
Es muy difícil asignar una magnitud a una erupción de una manera cuantitativa. Walker (1980) sugirió que se necesitan cinco parámetros para caracterizar adecuadamente la naturaleza y tamaño de una erupción explosiva: Magnitud de masa, es la masa total del material eruptado. Intensidad , es la razón a la que el magma es expulsado (masa/tiempo). Poder dispersivo, es el área sobre el cual se distribuyen los productos volcánicos y está relacionada con la altura de la columna eruptiva. Violencia , es una medida de la energía cinética liberada durante las explosiones, relacionada con el alcance de los fragmentos lanzados, Potencial destructivo , es una medida de la extensión de la destrucción de edificaciones, tierras cultivables y vegetación, producida por una erupción
En 1955 Tsuya definió una escala de magnitudes basadas en el volumen de los distintos tipos de materiales eruptado. En 1957 Yokoyama y en 1963 Hédervari, propusieron extender las escalas de volumen a una escala de Magnitud de energía , basada en la relación de proporcionalidad directa entre la masa del material emitido, su volumen y la energía liberada. Recientemente, De la Cruz-Reyna(1990) definió una escala de magnitudes basada en la relación entre el tamaño de las erupciones y su razón global de ocurrencia. Una medida del tamaño de las erupciones que combina algunos de los parámetros anteriores (dependiente de la disponibilidad de información), es el índice de explosividad volcánica, VEI (Newhall y Self, 1982). Las erupciones históricas tienen asignado un número del 0 al 8. Los números VEI corresponden a las siguientes características de erupción:

ERUPCION VOLCANICA

Durante muchísimo tiempo se pensó que la actividad volcánica la producía la entrada de agua sometida a altas temperaturas al interior de la tierra. Sin embargo con el pasar de los años, los geólogos han unido este proceso al fenómeno del movimiento de las placas tectónicas. Una de las cosas que ayudó a los expertos a concluir esto, es que la mayoría de los volcanes del planeta se encuentran situados en las fronteras de las placas más importantes.
Los volcanes se forman en dos tipos de fronteras de placa: las convergentes y las divergentes. En las primeras, donde una placa penetra bajo otra, la materia de la parte superior de la placa seducida es arrastrada en una trayectoria oblicua hacia el interior de la Tierra, hasta que alcanza una profundidad en la que se funde. Entonces asciende por fisuras verticales y es expulsada hacia la superficie por una chimenea volcánica. En las fronteras divergentes, como la dorsal del Atlántico, donde la corteza oceánica se estira y se separa, se forma una zona lineal débil; ésta sirve de salida para la erupción de magma que asciende por corrientes de convección gigantes situadas en el manto.
Una segunda teoría que explica el porqué de la erupción volcánica es la que expresa que las erupciones ocurren cuando la presión de los gases disueltos acumulados en el magma, aumenta considerablemente y la tierra no puede resistirla. Los vulcanólogos han enunciado varias teorías para explicar la acción de los gases volcánicos como generadores de una erupción. La teoría más sencilla establece que el mecanismo es similar a la forma en que el gas en una bebida gaseosa puede provocar un chorro de ésta, o a lo que ocurre al agitar una botella de gaseosa.

www.rinamed.net/es/es_ris_volc.htm

CONSECUENCIAS Y CAUSAS DE LAS ERUPCINES.

Las erupciones volcánicas son conocidas por devastar todo lo que se les atraviesa en el camino. La vida no es una excepción. Cada vez que un volcán expulsa lava, arrasa con todo lo que está a su paso. A lo largo de la historia del mundo, han ocurrido un sin fin de muertes humanas por erupciones volcánicas. Cerca de 160.000 en Indonesia, 32.000 en la región del Caribe. 19.000 en el Japón y 30.000 en el resto del mundo

Las erupciones también dejan consecuencias que se hacen presentes a largo plazo, es decir, tiempo después de desastre. Está demostrado que en todas las zonas vulnerables a la actividad volcánica, existe un incremento en el número de personas que solicitan atención médica por problemas de asma respiratorio y bronquitis e inconvenientes con la vista. Un estudio de hogares en Yakima, Washington, mostró que cerca de un tercio de los pacientes con enfermedades pulmonares crónicas que no enfermaron lo suficiente como para acudir al hospital en el momento de la erupción, de todos modos experimentaron una marcada exacerbación de sus síntomas respiratorios durante el período en que subieron los niveles de cenizas respirables que continuaron elevados por más de 3 meses después de la erupción.
CAUSAS
Las erupciones volcánicas se dan por ascenso de magma a la superficie. Aunque el vulcanismo es más abundante en las placas divergentes y convergentes también se da en las transformantes.
  • En las dorsales o zonas de rift, el volcanismo está directamente relacionado con el mecanismo de creación de corteza. En las dorsales la litosfera oceánica se va adelgazando debido a fuerzas tectónicas divergentes hasta que se parte y se separa en dos fragmentos que se alejan a velocidades de unos pocos centímetros por año. El adelgazamiento de la litosfera oceánica debido a la extensión, hace ascender las isotermas del manto, permitiendo que el material mantélico que era estable a temperaturas y presiones propias de profundidades de más de 100 Km., ascienda y lo sea a profundidades de 50 Km. o menos. En este caso la mayor parte del vulcanismo es submarino y sólo en algunos casos, como en Islandia, llega a la superficie creando islas de material volcánico.
    En los rifts continentales la litosfera continental adelgaza y asciende material mantélico, a veces creando unas protuberancias de hasta 2 Km. de altura.
 
  • En las zonas de subducción el vulcanismo está asociado a la penetración de la capa litosférica oceánica en el manto. Es el caso del llamado Cinturón de Fuego en el océano Pacífico. Mientras la corteza oceánica subduce se crea una larga depresión linear paralela a la zona de subducción llamada fosa oceánica (como la fosa de las Marianas en el margen oeste del anillo de fuego, que alcanza los 11 km bajo el nivel del mar)
    Parte del material introducido en el manto, asciende hasta la superficie, formando zonas de volcanismo activo detrás del frente de subducción. La producción de este fenómeno se supone que es debida a la migración hacia la superficie de material menos denso contenido en la placa litosférica que ha penetrado dentro del manto; aunque su exacto mecanismo no es todavía del todo bien conocido.
    Si se produce subducción de litosfera oceánica frente a litosfera también oceánica se forma un arco de islas en el océano, como en el caso de la costa asiática del océano pacífico. En caso de que la litosfera oceánica subduzca bajo litosfera continental, aparece la línea de volcanes (arco volcánico) a lo largo de la costa (como es el caso de la cordillera de los Andes en Sudamérica). Generalmente la línea de volcanes paralela a la costa está situada a unos 150 Km. por encima de la placa buzante.
  • El volcanismo no está limitado a los márgenes de placas, sino que se produce también en su interior. Ejemplos de este tipo de volcanismo son las islas Hawaï, prácticamente en el centro de la placa del Pacífico. Otro lo forman las islas volcánicas situadas en el margen pasivo de África, entre ellas las islas Canarias. Muchos de estos volcanes intraplacas están asociados a puntos calientes o plumas convectivas de material caliente del manto. Estas plumas se generan en el manto inferior y suben lentamente a través del manto por convección. Debido a su gran profundidad son fenómenos muy estables que han podido permanecer constantes a lo largo del tiempo geológico. El desplazamiento de la placa sobre el punto caliente estacionario deja una huella de una fila de volcanes, de la que sólo los últimos son activos .
  • es.wikipedia.org/wiki/Erupci%25C3%25B...

miércoles, 23 de marzo de 2011

video

causas

Causas de un tsunami
Un tsunami -también conocido como maremoto- es una ola o serie de olas que se producen en una masa de agua al ser empujada violentamente por una fuerza que la desplaza verticalmente. Terremotos, volcanes, meteoritos, derrumbes costeros o subterráneos e incluso explosiones de gran magnitud (como las pruebas de bombas submarinas) pueden generar los mortales tsunamis como el que, hace años ha arrasado la costa del sureste asiático provocando miles de muertos.
El brusco movimiento del agua desde la profundidad genera un efecto de “latigazo” hacia la superficie que es capaz de lograr olas de magnitud impensable. Teniendo en cuenta que la profundidad habitual del Océano Pacífico es de unos 4.000 m., se pueden provocar olas que se mueven a 700 km/h. Y como las olas pierden su fuerza en relación inversa a su tamaño, al tener 4.000 m puede viajar a miles de kilómetros de distancia sin perder mucha fuerza.
Sólo cuando llegan a la costa comienzan a perder velocidad, al disminuir la profundidad del océano. La altura de las olas, sin embargo, puede incrementarse hasta superar los 30 metros (lo habitual es una altura de 6 o 7 m).

La causa más frecuente para la formación de olas gigantes son los terremotos ocurridos en el fondo marino. Cuando éste se mueve violentamente en sentido vertical, el océano ve alterado su equilibrio natural. Cuando la inmensa masa de agua trata de recuperar su equilibrio, se generan las olas gigantescas. Su tamaño dependerá de la magnitud del seísmo y de la deformación vertical del fondo marino. No todos los terremotos generan tsunamis, sino sólo aquellos de magnitud considerable, que ocurren bajo el lecho marino y que son capaces de deformarlo.

Si bien cualquier océano puede experimentar un tsunami, es más frecuente que ocurran en el Océano Pacífico, donde son también más comunes los terremotos de magnitudes considerables (especialmente las costas de Chile, Perú y Japón). Además el tipo de falla que ocurre entre las placas de Nazca y Sudamericana, llamada de subducción -cuando una placa se va deslizando bajo la otra- hacen más propicia la deformidad del fondo marino y por ende los tsunamis u olas gigantes.

Precisamente por eso los más devastadores casos de olas gigantescas han ocurrido en el Océano Pacífico, pero también se han registrado casos en el Atlántico e incluso en el Mediterráneo. Un gran tsunami acompañó los terremotos de Lisboa en 1755, el del Paso de Mona de Puerto Rico en 1918, y el de Grand Banks de Canadá en 1929.
Causas de los maremotos o tsunamis. La palabra tsunami proviene del japonés, es un compuesto de “tsu” que significa “puerto” y de “nami” que significa “ola”.
Los tsunamis son producidos por terremotos en el fondo oceánico, que desplazan la masa de agua hacia arriba provocando olas gigantescas. El peligro de éste fenómeno se origina cuando esas olas llegan a la costa. No todos los terremotos generan tsunamis, únicamente aquellos de magnitud considerable.
Los maremotos más frecuentes ocurren en el Océano Pacífico, especialmente en las costas de Chile, Perú y Japón, por el tipo de falla que se origina entre las placas de Nazca y la placa Sudamericana, llamada falla de subducción. Una placa se desliza bajo la otra, deformando el fondo marino y originando violentos movimientos de agua, que ascienden hasta la superficie ocasionando olas de 30 metros de altura, que son capaz de recorrer enormes trayectos antes de tener contacto con la tierra.

bibliografía
www.angelfire.com/nt/tsunamis

maremotos

Los maremotos más frecuentes ocurren en el Océano Pacífico, especialmente en las costas de Chile, Perú y Japón, por el tipo de falla que se origina entre las placas de Nazca y la placa Sudamericana, llamada falla de subducción. Una placa se desliza bajo la otra, deformando el fondo marino y originando violentos movimientos de agua, que ascienden hasta la superficie ocasionando olas de 30 metros de altura, que son capaz de recorrer enormes trayectos antes de tener contacto con la tierra.
Causas de los maremotos o tsunamis. La palabra tsunami proviene del japonés, es un compuesto de “tsu” que significa “puerto” y de “nami” que significa “ola”.
Los tsunamis son producidos por terremotos en el fondo oceánico, que desplazan la masa de agua hacia arriba provocando olas gigantescas. El peligro de éste fenómeno se origina cuando esas olas llegan a la costa. No todos los terremotos generan tsunamis, únicamente aquellos de magnitud considerable

INTENCIDAD.

Intensidad del sismo.
La magnitud del terremoto, por ejemplo, es la medida de la amplitud de la mayor de las ondas sísmicas que produce. Y el reciente terremoto de Indonesia estaba justo en el umbral de magnitud que se considera suficiente para generar un tsunami.
"Los terremotos por debajo de 7.5 grados generalmente no provocan tsunamis", asegura el geofísico Don Blakeman, del Centro Nacional de Vigilancia Geológica de los Estados Unidos. "Sin embargo, sabemos de terremotos de magnitud 6 que han causado tsunamis locales, más pequeños y menos destructivos".
Por lo que sabemos, un terremoto provoca un tsunami cuando la actividad sísmica causa el movimiento vertical de las masas de tierra que hay a lo largo de las líneas de falla. Esto es, la tierra que está cerca de los bordes de las placas en que está dividida la corteza terrestre.
Cuando alguna parte del fondo marino se desplaza verticalmente, o empieza a moverse alternativamente hacia arriba y hacia abajo, también se desplaza la columna de agua que tiene justo encima. Un movimiento que crea, a su vez, una onda de energía que impulsa el agua hacia arriba. Al contrario, los terremotos que mueven el terreno horizontalmente tienen muchas menos probabilidades de generar tsunamis.
De hecho, cuando la energía de estos seísmos empuja las placas en sentido horizontal, el agua no se ve afectada, y el tsunami no se produce, independientemente de la intensidad del terremoto.
Luego está la cuestión de la altura que puede llegar a alcanzar un tsunami. Y eso, el hecho de que una ola tenga tres o quince metros, depende de cómo el movimiento vertical de la tierra causado por el terremoto interactúe con la topografía del fondo marino en su recorrido hacia la costa.
Ese factor, opinan los investigadores, basta para amplificar el tamaño de las olas del tsunami durante su viaje. «Cuando viaja en alta mar -explica Bakeman- un tsunami se mueve normalmente a una velocidad que está entre los 800 y los 1.000 km. por hora, prácticamente la misma de un avión a reacción. Pero a medida que se acerca a tierra esa velocidad disminuye». Los fondos costeros más bajos producen olas más altas. Y al contrario.
Por último, y en contra de la creencia popular, los tsunamis no se ven influenciados por las condiciones meteorológicas. Su energía procede del movimiento brusco de los fondos marinos, y eso no varía, o lo hace muy poco, con el tiempo que encuentren durante su viaje.

www.jmarcano.com › HogarInformativas

introduccion

Antecedentes.
Al hablar de  desastres naturales estamos hablando de todo los desastres que existe en el mundo y ecuador es una de las que se encuentra dentro del cinturón del fuego.
Tsunami[1] es una palabra japonesa: ‘ola’; literalmente significa ‘ola de puerto’) que se refiere a maremoto. Se comenzó a utilizar por los medios de comunicación masiva cuando los corresponsales de habla inglesa emitían sus reportajes acerca del maremoto que precisamente ocurrió en el Asia (el 25 de diciembre de 2004 en el océano Índico). la denominación correcta en español no es tsunami.
Justificación
Este trabajo se lo realiza con la finalidad de que los receptores conozcan estos temas de gran utilidad y sepan como manejarlos.
Causas de un tsunami
Un tsunami -también conocido como maremoto- es una ola o serie de olas que se producen en una masa de agua al ser empujada violentamente por una fuerza que la desplaza verticalmente. Terremotos, volcanes, meteoritos, derrumbes costeros o subterráneos e incluso explosiones de gran magnitud (como las pruebas de bombas submarinas) pueden generar los mortales tsunamis como el que, hace años ha arrasado la costa del sureste asiático provocando miles de muertos.
El brusco movimiento del agua desde la profundidad genera un efecto de “latigazo” hacia la superficie que es capaz de lograr olas de magnitud impensable. Teniendo en cuenta que la profundidad habitual del Océano Pacífico es de unos 4.000 m., se pueden provocar olas que se mueven a 700 km/h. Y como las olas pierden su fuerza en relación inversa a su tamaño, al tener 4.000 m puede viajar a miles de kilómetros de distancia sin perder mucha fuerza.
Sólo cuando llegan a la costa comienzan a perder velocidad, al disminuir la profundidad del océano. La altura de las olas, sin embargo, puede incrementarse hasta superar los 30 metros (lo habitual es una altura de 6 o 7 m).

La causa más frecuente para la formación de olas gigantes son los terremotos ocurridos en el fondo marino. Cuando éste se mueve violentamente en sentido vertical, el océano ve alterado su equilibrio natural. Cuando la inmensa masa de agua trata de recuperar su equilibrio, se generan las olas gigantescas. Su tamaño dependerá de la magnitud del seísmo y de la deformación vertical del fondo marino. No todos los terremotos generan tsunamis, sino sólo aquellos de magnitud considerable, que ocurren bajo el lecho marino y que son capaces de deformarlo.

Si bien cualquier océano puede experimentar un tsunami, es más frecuente que ocurran en el Océano Pacífico, donde son también más comunes los terremotos de magnitudes considerables (especialmente las costas de Chile, Perú y Japón). Además el tipo de falla que ocurre entre las placas de Nazca y Sudamericana, llamada de subducción -cuando una placa se va deslizando bajo la otra- hacen más propicia la deformidad del fondo marino y por ende los tsunamis u olas gigantes.

Precisamente por eso los más devastadores casos de olas gigantescas han ocurrido en el Océano Pacífico, pero también se han registrado casos en el Atlántico e incluso en el Mediterráneo. Un gran tsunami acompañó los terremotos de Lisboa en 1755, el del Paso de Mona de Puerto Rico en 1918, y el de Grand Banks de Canadá en 1929.
bibliografía